La Organización Mundial de la Salud asegura que hasta el 80% de los casos de ceguera son evitables pero asintomáticos, es por ello, que los especialistas insisten en la importancia de un diagnóstico a tiempo para detener los diferentes problemas de visión que afectan a la población.
Realizarse revisiones periódicas es clave para que cualquier problema visual se pueda corregir a tiempo, así lo afirmó Gloria Hermida, presidenta de la Sociedad Internacional de Optometría del Desarrollo y Comportamiento en una entrevista para Infosalus.
La Dra. Hermida explicó que un examen ocular no debe confundirse con uno optométrico. Este último es una prueba básica capaz de detectar disfunciones, anormalidades, patologías oculares y, por tanto, interviene también en la prevención de enfermedades oculares.
La información derivada del examen optométrico es de suma importancia y servirá de apoyo para otros profesionales sanitarios, en este caso oftalmólogos, para indicar la correspondiente medida correctiva según el caso.
Por su parte, un examen visual completo solo puede ser realizado por un oftalmólogo, ya que requiere conocimientos y equipos especiales para mirar alrededor y dentro del ojo. Gracias a este examen se puede descubrir si hay signos de enfermedad que puedan amenazar la salud de los ojos.
Y es que este diagnóstico no solo permite detectar cualquier problema con la visión, sino que también puede detectar síntomas de patologías que pueden conducir a la pérdida de la visión tales como diabetes, presión arterial alta, colesterol alto, tumores, cáncer, trastornos autoinmunes y de la tiroides. Así lo explicó el oftalmólogo argentino Robert Kaufern para Infobae .
En principio, muchas de estas patologías no suelen causar síntomas hasta que ya están avanzadas, por ello es de suma importancia acudir regularmente a revisiones optométricas o exámenes oftalmológicos para una correcta prevención.